El transporte ecológico: un nuevo horizonte de empresa

La mudanza es una actividad que produce una gran cantidad de residuos y contaminación por el uso del combustible. Frente a esta realidad, es cada vez mayor el número de empresas que busca el adjetivo "verde" como ventaja competitiva dentro del sector. Enterate de cuáles son los requisitos para pasar la prueba ecológica.

El embalaje

Una de las medidas que puede tomar una empresa de mudanza para colaborar con el medio ambiente es remplazar las tradicionales cajas de cartón con canastos plásticos o de mimbre. Por un lado se evita el desperdicio innecesario de cartón y, por otro, los canastos pueden reutilizarse y alquilarse a los clientes para que organicen el traslado de sus cosas. Si se opta por utilizar cajas de cartón lo ideal es volver a utilizarlas para futuras mudanzas.

Otra idea es envolver los objetos pequeños (la vajilla, por ejemplo) en papel reciclado. De esta manera la empresa también puede ahorrar gastos y cuidar el medio ambiente.

El viaje

Uno de los aspectos más contaminantes de una mudanza y de cualquier tipo de transporte es la contaminación por hidrocarburos. Cuantos más viajes se realicen, mayor será el nivel de contaminación. 

Para reducir el impacto medioambiental por la emisión de CO2 una propuesta interesante es realizar mudanzas compartidas. Ofreciendo este tipo de servicio la empresa puede conseguir más clientes sin incurrir en gastos extra de combustible y transporte. Al mismo tiempo, la mudanza compartida implica un ahorro para la mudancera.

Servicios ecológicos

Otro ejemplo de empresas de mudanzas ecológicas son aquellas que ofrecen un servicio de recogida de documentación u otros materiales (electrónicos, maquinaria…) para destruir. Este servicio es contratado principalmente por empresas y oficinas que solicitan a las mudanceras la recolección del material para que lo lleven a sus instalaciones, lo destruyan y después reciclen los restos.

Acordate: el cuidado del medio ambiente es un valor añadido para la empresa.